Al hombre de mi vida...

A los 24 años y 7 meses casi exactos, caí en la cuenta que tengo un novio-marido muy normal para lo normal.

Tiene pensamientos de dioses, rulos de ángel y mirada protectora.
Su cuerpo es como los personajes de sus mil y un cuentos fantásticos, con piel de bebé adornada con lunares que nunca termino de besar.
Tiene pies grandes para aferrarse a la tierra, voz grave y clara,
con cierta tonada que enamora.
En sus ojos circulares se pueden ver montañas de siete colores.
Es ingeniero de un sin fin de cosas.
Tiene buen genio, humor negro y sonrisa de payaso.
Su optimismo que hace de mi vida luz, a veces se torna molesto...
pero lo arregla con canciones de cuna.
Los niños asienten que es un superhéroe, y yo que es un caballero.
Es un luchador de los valores humanos y lo predica desde el ejemplo. Siempre le gusto la verdad hasta que duela...
Al hombre de mi vida le debo varios poemas, comidas y disculpas.

Muchas veces me pierdo...
pero siempre vuelvo a encontrarme...
entre sus brazos.

El gran escritor G.Marquez le escribió un cuento de hadas para sus siestas:
"miren allá, donde el viento es ahora tan manso que se queda a dormir debajo de las camas, allá, donde el sol brilla tanto que no saben hacia dónde girar los girasoles, sí, allá, es el pueblo de Esteban".