Iba caminando entre fuegos y tormentas, con media lágrima en la mejilla....
Por esas casualidades de la vida... me cruce con Ella, la mujer más maravillosa del mundo...
Me mira... y sin preguntarme absolutamente nada, sonrió
Luego se sienta en el tapial, saca pacientemente un cigarrillo, lo prende, acomoda su larguisimo pelo
y me dice: "te voy a contar un cuento":
..."el moribundo pregunta a su salvador: y tú quien eres?...
El salvador le responde, soy el tiempo"
Nosé si ese cuento me salvó la vida, pero me ahorró varios fracasos y disgustos.
Hoy le cito las dos últimas palabras, El tiempo...